viernes, 19 de diciembre de 2014

La estética del lenguaje en Basilio Belliard, sus obras: Piel del aire y Oficio de arena. y Oficio de arena

La estética del lenguaje en Basilio Belliard, sus nuevas obras:                                                                    Piel del aire y  Oficio de arena
Por Eli Quezada                                                                                   16 de noviembre de 2011 a la(s) 18:25


“La piel es lo más profundo que hay en el hombre.” Paul Valery

Y me dejo seducir por la intensidad del órgano más grande que tiene cualquier cuerpo humano o de la naturaleza: la piel. Y nos llegan a la mente varios títulos alegóricos tales como “La piel del tambor” novela de Arturo Pérez-Reverte; pero además “La piel del cielo” de Elena Poniatowska. "La sílaba en la piel" de José María Lima. Y “Piel de Otoño”, una telenovela con mucho drama y una historia diferente que merece la pena nombrarla. Y como si no fuera suficiente, quien suscribe pretende sacar su nuevo poemario bajo el nombre… Piel de abril, y por supuesto, la piel que nos ocupa, Piel del aire, de nuestro amigo y mejor ser humano Basilio Belliard.

Ya nos deleitábamos transitando las grietas de las rugosidades sensoriales de un bosque apasionado en su libro “Los pliegues del bosque”; Y nos dejamos seducir por los tambores en “una balada del ermitaño”…reconocimos un gran amante de Octavio Paz, de Baudalaire  y de Barthes en sus interesantes ensayos.

Hoy, luego de leer su Piel del aire, y sus relatos o mini ficciones fantásticas, recompilados en su reciente libro “Oficio de arena” no nos queda duda que estamos ante un poeta consumado, estéticamente formal y sensiblemente escueto. Un poeta-visual hecho del aire, de arena, de esa que se lleva el viento, como nos cuenta, que de niño al aprender a escribir, primero escribía al aire. No hay lugar a dudas, Basilio permanece escribiendo con las letras de lo que el viento se llevó.

“…escribía en el aire, las palabras que me dictaba el insomnio.”pp.42 -Oficio de arena.

Y es que la piel encierra tanto…es tan sugerente como el aire, el cielo, la arena, el tambor, abril, otoño o la primavera.  No son las palabras, al fin y al cabo, las que tienen alas propias. Las alas se las ponen los autores cuando le dan vida. Las palabras sueltas son frías, insípidas, solitarias, hasta que los creadores le donan funciones animadas con los tropos, con las figuras, con las ficciones. Las cazan, las engarzan, las eternizan en versos inolvidables. Y de esto sabe Basilio Belliard cuando dice:

“…Prófugo,
el espacio despuebla
sus aguas de tinieblas. ”pp.75, Piel del aire.


Y cuando versa sobre la poesía y dice:

“Duro es el taller de las palabras
 cuando el ritmo cincela la
 lengua.

Dúctil el verso
Cuando pinta de arena
Las sílabas y los días.” pp.61-Piel del aire.

Y me recuerda tanto a Octavio Paz y su teoría del ritmo que el propio Basilio, propone de manera magistral en este ejemplo.
Es que la mirada de Basilio se posa en el exterior sin abandonar sus poros erectos de emoción. Tiene una mirada plástica, objetiva adornada con la gracia de la inspiración y los fundamentos académicos lo que le dan a su obra un estilo y una voz propia, a pesar de las fuertes referencias que se arrastran como olas indomables al momento que sucede la seducción de la palabra y el olvido de la memoria.
Basilio es un arquitecto de su poética epitelial en este caso, de la piel del aire; pero lo es de sus ficciones fantásticas. De sus sueños y sus pesadillas. El autor nos dice en cada verso que ama la naturaleza; dibuja y desdibuja el paisaje; le da color y significado. Crea el verso y lo eterniza. Cuando ve no sólo lo hace con la mirada sino con su piel y se la regala a su obra.
Me encanta la concepción crítica del destacado crítico, escritor dominicano Armando Almánzar sobre la obra poética de Basilio Belliard porque creo define su estilo, su estética y su voz propia, misma que vemos tanto en PIEL DEL AIRE como en las mini ficciones  OFICIO DE ARENA y es que la literatura de Belliard, para mí es como él afirma y cito:

 “…la contemplación serena de la emoción decantada por la voluntad estética de la forma.” -Epílogo de Balada del ermitaño.-


En fin, desnudo, puntual, breve, incitante y templado es el estilo de Basilio Belliard… dándonos una prosa acabada y unos versos inmortales.


 Por Elizabeth Quezada                                                                                                                                       Derechos reservados,2011.RD

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